¿Qué son las coronas dentales?
Las coronas dentales son estructuras utilizadas para fortalecer una pieza dental que se encuentra debilitada ya sea por una caries extensa, una fractura o un tratamiento de nervio previo que ha causado un gran desgaste a la estructura de la corona natural. También son colocadas sobre los implantes para reemplazar el o los dientes faltantes.
Preguntas Frecuentes
La corona completa de porcelana tiene la ventaja que no contiene metal en su estructura y brinda excelentes resultados cosméticos, el color de estas puede igualar el de los dientes naturales consiguiendo que el paciente se sienta con la tranquilidad de sonreír de nuevo sin preocuparse que otras personas noten que tiene una restauración dental.
Una corona dental es necesaria en las siguientes condiciones :
- Reemplazar una restauración o calza muy extensa y de esta manera evitar que el diente se fracture.
- Proteger un diente que está fracturado.
- Cubrir un diente que tenga una malformación o que sea muy pequeño y que estéticamente no se ve bien.
- Fortalecer un diente al que se le ha realizado un tratamiento de nervio y que ha quedado muy debilitado.
- Cuando se ha colocado un implante dental.
- Para cubrir dientes que serán el soporte de un puente dental.
- Reemplazo de coronas dentales antiguas.
El tratamiento para realizar las coronas generalmente requiere de dos a tres citas. En la primera se talla el diente para reducir su tamaño tanto en altura como espesor para que la corona que vaya a ser colocada sobre el diente quede del mismo tamaño y forma del diente natural. Posteriormente el doctor toma una impresión del diente, con el fin de tener una réplica exacta del diente que ha sido tallado, el odontólogo también define el color en que se va a elaborar la corona para que sea igual al de los dientes naturales y de esta forma vaya a ser imperceptible. Se coloca una corona provisional de un color similar al del diente para protegerlo hasta que se coloque la corona definitiva.
La impresión es enviada al laboratorio junto con la información de color, tamaño y forma que ha indicado el odontólogo, con esto el técnico realiza la corona justa y adecuada para el paciente.
En la segunda cita el odontólogo remueve el provisional y prueba la corona definitiva que envió el laboratorio, se revisa que el tamaño, forma y color sean los apropiados para el paciente, se chequea la mordida y se cementa la corona definitiva con un cemento especial que produce una unión muy fuerte entre el diente y la corona dental definitiva.
Las coronas dentales no requieren de un mantenimiento complicado, se deben de tener cuidados similares a los que se tienen con un diente natural, como una buena técnica de cepillado, uso de hilo dental y enjuague.
Para prevenir fracturas en la estructura de la corona se debe tener cuidado al masticar alimentos muy duros, o evitar hábitos nocivos como masticar hielo, morder bolígrafos o sostener objetos por tiempos prolongados.
